Ser sostenibles también en el “alma”
Incluso si la Semana Europea para la Reducción de los Residuos ya ha terminado desde hace unos días, nuestra alma verde todavía tiene algo que deciros sobre este tema.
Tras aconsejarte 12 buenas normas para reducir los gastos y decirte cómo sería posible limpiar las aguas de los ríos, ahora queremos llamar tu atención sobre la REUTILIZACIÓN. Hoy en día, se reciclan muchísimos materiales, entre los cuales plástico, goma, vidrio, madera, viejas láminas bituminosas, fibras textiles, papel, cartón y muchos más.
Pero ¿te has preguntado alguna vez dónde terminan los residuos resultantes de la demolición de edificios y construcciones y si se puede de alguna forma reciclarlos?
Entonces...¡hoy vamos a hablar precisamente de la reutilización de los materiales de construcción!
Son muchísimos los materiales que, al final de la propia vida útil, se destinan al reciclaje y a la reutilización. No estamos hablando solo de los “clásicos” papel, vidrio, plástico presentes en nuestra cotidiana y rutinaria diferenciación.
No, esta vez vamos a meternos dentro del alma de los edificios.
En Italia, cerca de un tercio de los residuos producidos procede del sector de la construcción. Y si, son residuos bastante voluminosos. Pero no os preocupéis. ¡Utilizarlos para nuevas construcciones se ha convertido en una posibilidad real!
La investigación actual se orienta cada vez más hacia el desarrollo de soluciones innovadoras y eficaces.
Está sobre todo intentando estudiar nuevas estrategias para recuperar materiales procedentes de actividades de demolición y utilizarlos otra vez en el sector de las construcciones, en lugar de deshacerse de estos residuos de otra manera, sobre todo en los vertederos.
Los vertederos representan la opción menos sostenible, no obstante esto sigue siendo la más seguida. La recuperación de los residuos de construcción es aún poco frecuente en Italia y aún no se ha arraigado tanto como para convertirse en una práctica social difundida.
La eliminación y recuperación de los residuos de construcción siguen siendo problemas muy urgentes. La legislación italiana establece exactamente la cantidad de material que se puede recuperar y reciclar, el origen de los residuos reciclables, sus características y el procedimiento que hay que seguir para convertir los residuos en nuevos recursos. Mientras la fase final de la recuperación de los materiales de construcción conlleva algunos tratamientos diferentes, según sus origen y naturaleza, para que sean adecuados para el reciclaje y la reutilización.
Buenos resultados se podrían obtener desde el principio de la cadena de recuperación si estos residuos fueran homogéneos, o sea si fueran separados por fracciones homogéneas orientadas hacia el reciclaje de los mismos materiales. Lo cual se puede alcanzar sólo a través de una lógica de demolición selectiva, como dicho. De esta forma, utilizar otra vez el material en el mismo sector sería más fácil, se reducirían los costes y las dificultades en las fases sucesivas del reciclaje.
No obstante la ayuda proporcionada por el Protocolo UE para la gestión de los residuos de construcción y demolición (Ref. Ares 2016, 6914779 - 12/12/2016) que pone a disposición una guía con las informaciones necesarias para poder demoler de manera selectiva, en la industria de las construcciones esta no es una petición sencilla, como los residuos de las demoliciones son siempre muy heterogéneos.
En 2017 Legambiente, con el Informe del Observatorio Recycle, había mostrado la situación sobre el utilizo de los materiales reciclados, con el objetivo de contar y profundizar los cambios procedentes del uso de materiales reciclados en el sector de las construcciones también, bajo el impulso de la Directiva CE 2008/98.
Cuando se construye un edificio se tienen que considerar tres recursos: materiales, energía, agua. Y se tiene que considerar también que los procesos de utilización y desgaste de estos recursos materiales (en la fase de extracción, elaboración, transporte, construcción, eliminación) generan daños ambientales, como el calentamiento global, la contaminación, la reducción de recursos naturales, la producción de residuos y, no menos importante, problemas de salud.
Como la sensibilidad hacia los temas ambientales es cada vez mayor, el desarrollo tecnológico está cada vez más orientado hacia procesos eficientes que garantizan resultados muy buenos en términos de rendimiento de los materiales obtenidos y que supondrían un ahorro energético considerable.
Hoy en día los ejemplos de edificios en los cuales se han utilizado materiales que eran residuos y se han convertido en nuevos productos aumentan constantemente.
En Italia, el estadio de la Juventus, inaugurado en Turín en 2011, es un verdadero ejemplo de edificio “reciclado”. Para realizarlo, se recuperaron y reciclaron muchos de los materiales procedentes del desmantelamiento del viejo estadio Delle Alpi: 40.000 metros cúbicos de hormigón, quebrantados y utilizados como base, 5.000 toneladas de acero específicamente procesado, 2.000 metros cuadrados de vidrio, 300 toneladas de aluminio. No sólo ha sido reutilizado material, sino que también han sido seleccionadas varias soluciones por el ahorro energético, la utilización de fuentes renovables y la reducción del desperdicio de agua. ¡Un verdadero estadio verde!
Otro ejemplo es el complejo residencial Casanova EA8 en Bolzano, formado por 85 unidades residenciales divididas entre tres bloques compactos, cuyos ladrillos proceden por 20% de material reciclado y de recuperación.
Por ejemplo, la tecnología REBRICK, diseñada y patentada por la empresa danesa Gamle Mursten, tiene el objetivo de una gestión más eficaz de los residuos procedentes de demoliciones y se basa sobre la limpieza automática del hormigón y del cemento de los viejos ladrillos. De esta manera, los ladrillos se pueden reutilizar para actividades de construcción en lugar de ser desmenuzados en agregados mixtos.
En el extranjero, un ejemplo perfecto de edificio sostenible es la Big Dig House de Lexington, Massachusetts, diseñada y construida con material reciclado en cada sección. El edificio es el resultado de un proyecto de alto diseño y representa en pleno la vocación al reuso y a la recalificación de materiales de desecho. ¿Puedes creer que su alma de cemento y acero está hecha de residuos procedentes del desmantelamiento de una autopista?
Como se puede entender, el objetivo es hacer que el ecosistema inmobiliario pueda realizar una renovación sostenible, basada no solo en soluciones alternativas y en el uso y reuso de materiales reciclados, sino también en la integración de soluciones basadas en la naturaleza.
El sector de las construcciones desempeña un papel fundamental en el futuro de Italia sin emisiones y sostenible y esperamos que puedan seguir cambiando las maneras de construir y vivir en nuestras ciudades, evitando el desperdicio y reciclando cuando sea posible.
Ya estamos acostumbrados a ver vestidos, joyas, herramientas y muebles diseñados a partir de productos de desecho. Pero si en el ámbito del diseño esta tendencia está cada vez más de moda, en el ámbito de las construcciones todavía hay mucho camino que recorrer. Ideas y proyectos no faltan, pero este es un sector entre los más problemáticos y contaminantes. donde hacen falta estrictas regulaciones para garantizar seguridad y resistencia de los edificios. Esta es la razón por la cual a la recuperación y al reuso de los residuos de construcción les cuesta arraigarse.
¿Qué opinas? ¿Crees que el futuro de las construcciones pueda dirigirse hacia la recuperación difundida de materiales previamente utilizados para dar a los ciudadanos nuevas formas de bienestar, proteger el paisaje y el medioambiente?
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